Da lo mismo, no te enredes. Camina en paz.
Da lo mismo, mires donde mires, siempre habrá un lugar donde perderte.
Da lo mismo, el alma tiene muchas formas, no tiene porque obsesionarte con una.
Da lo mismo. No tiene valor angustiarte por minutos menos de vida, por compañía perdida, por esforzarte en pensar, por un mañana mejor, por vivir en el presente.
Da lo mismo, todo da lo mismo, solo así puedes descansar... el único problema, es que no tiene valor vivir así.
No da lo mismo si te olvidas. La vida no es una sucesión de paginas, un libro que lees y después olvidas. Por el contrario, es la escritura de una única palabra enorme, que sientes cuando te mueres, que lees mientras vives, que escribes cuando lloras, cuando cantas, cuando te apasionas. Te cobijas en su significado, e iluminas los rincones mas recónditos de tu alma con ella.
No da lo mismo que te olvides, que no amanezcas, que no te desveles viviendo, porque todo alguna vez se concluye, converge, desenvuelve, deviene, y te cae desde el cielo al cuerpo como un sol enorme y caliente.
No da lo mismo si te olvidas, de vivir o de sobrevivir, de reír, porque el tiempo y los buenos momento que eventualmente pudiste construir, también se olvidarán de ti.